Esta frase que alguna vez hemos escuchado solemos atribuirla al "Quijote", de Cervantes, instintivamente. Su significado suele ser, más o menos, que hablen bien o mal de nosotros... lo importante es que hablen.
Pero la frase no está en ninguna de las páginas del ingenioso hidalgo.
El escritor-director de cine-actor Orson Welles escribió al final de su vida una especie de novela basándose en el Quijote, pero que en realidad no tenía nada que ver con el hidalgo... y que no consiguió terminar porque le llegó antes la muerte. En esa inacabada novela aparece la citada frase.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Volver a "Chesana".
Cualquiera puede comentar pero si escribes como "Anónimo", lo leeré pero no serás publicado... a no ser que te identifiques de alguna manera. Gracias por la comprensión.